Síntomas de alarma
Algunas de las señales que nos deben alertar cuando la perra está
embarazada o de parto son:
- La
perra lleva más de 65 días de gestación.
- Si
tarda más de 24 horas en comenzar a parir, cuando ya ha comenzado el
proceso de nacimiento de los cachorros.
- Cuando
lleva más de 60 minutos con contracciones y no nace ningún cachorro.
- Si
entre el nacimiento de un perro y otro, transcurren más de cuatro horas y
quedan más cachorros por nacer.
- Si
durante el parto, la perra no presenta síntomas de dolor y se muestra
apática.
- Si
unos días o semanas después del parto, hay síntomas de enfermedad como:
fiebre, inapetencia, decaimiento, las mamas están inflamadas, convulsiones
o rechazo hacia los cachorros. Estos síntomas pueden indicar que la perra
padece una inflamación de las glándulas mamarias, le falta calcio o tiene
infección en el útero.
Se considera normal que el intervalo de nacimiento entre un cachorro y
otro sea de una hora, pero puede haber momentos de descanso prolongados
entre la llegada de una cría y otra.
Se considera
normal que el intervalo de nacimiento entre un cachorro y otro sea de una hora
De hecho
estos intervalos pueden durar varias horas, lo cual es normal, siempre y cuando
no se produzcan contracciones. Si la perra tiene dificultades para extraer a
los cachorros, se le puede ayudar tirando de ellos con cuidado.
Causas de las dificultades
Las
principales causas que pueden provocar problemas a la hora del parto son las
"distocias" y la "inercia uterina". El primer caso consiste
en la imposibilidad de expulsar uno o más cachorros por diferentes causas, como
el tamaño excesivo de los cachorros con respecto a la madre o la incorrecta
colocación de las crías.
Fuente:
www.consumer.es