PINSCHER MINIATURA – SU HISTORIA
El pinscher miniatura es un pequeño valiente (se cree un
perro grande). Alegre y cariñoso, siempre está activo, y tiene ganas de jugar,
le gusta mucho su familia pero es desconfiado con los extraños.
Tiene la cabeza alargada, el cráneo plano y la dentadura
bien desarrollada, los ojos son grandes y de expresión viva, el lomo
ligeramente curvado, el vientre elevado y las patas rectas.
Las orejas deben ser rectas y naturales, aunque en algunos
países todavía se permite cortarlas, la cola sin cortar, aunque en sus orígenes
se exigía el corte de ésta, que el pelaje fuese corto, suave y pegado a la
piel. Los colores que se definieron fueron el rojo oscuro, el rojo mezclado con
pelos negros, el negro y rojizo, y el chocolate y rojizo. En la actualidad el
estándar de raza, en relación al color reconoce dos tipos:
Unicolor: Rojo
ciervo, rojo-marrón hasta el rojo oscuro-marrón.
Negro y fuego: Pelo negro laca con marcas fuego rojas a
marrones. Es deseable que las marcas sean lo más posible oscuras, saturadas y
bien delimitadas. Las marcas fuego se ubican: sobre los ojos, en la cara
inferior del cuello, en los metacarpos, en los pies, en las caras internas de
los miembros posteriores y en el perineo. En el antepecho, dos triángulos de
igual tamaño claramente separados uno del otro.
Fuente: Pinscher-miniatura.com